martes, agosto 19, 2008

A tí, sólo a tí


El mundo se ha desvanecido, ausente de todo lo que contenga
mi mente evoca únicamente momentos de aquel planeta construido
artificialmente, por decir algo
verdaderamente, por decirlo todo.
Aquella galaxia atemporal,
fusión de mis lecturas absurdas y tu risa encantadora.

Desaparecen los detalles rídiculos que a nadie le importa,
la gente se pasea alrededor sin percatarse de que no existen
al menos en nuestras proyecciones.
Se han convertido en personajes hechos de tiza,
pantomimas rídiculas impregnadas en una pared olvidada.

Ya nada sabe tan bien, nisiquiera algo es capaz de deleitarme
sólo sonrio ante tu prescencia ansiada efusivamente.
Te espero las veinte y cuatro horas del día,
te sueño mientras duermo para encontrarte,
te busco en cada detalle; nace una compulsión extraña de ti.

No puedo cerrar este poema,
no quiero despedirme de ti en ningúna forma;
aunque sepa que me cruzaré contigo pronto.
No quiero tener que decirte adiós, aunque te diga buenos días horas despúes.
Aún así, y ante la obviedad de las despedidas cortas,
mi mente funciona a toda hora y en este momento,
tú imagen es la única que logra percibir con claridad
y al mismo tiempo, es ya la que más le place.




domingo, agosto 17, 2008

Momento I


Acontece la desaparición del mundo,
el alrededor perece un momento
el orden raciona es ya ilógico
todo cabe en un sólo beso.

Es el arte sublima
que inspira hondo
llenando sus venas de vida
complementandolas de sus sin-razones

El tiempo, ¡porfin no existe!
no hay tic-tac imperando
las manijas se detienen,
y no vale la pena ordenar
los momentos que perduran en sí.

Donde sea que florezca una rosa,
me detendré lo suficiente
como para llevarmela conmigo
a mi tierra sin tiempo.

Y tú, sólo tú...
sabrás que estos versos
son para mi rosa
cobijada bajo las estrellas



lunes, agosto 11, 2008

Pintura sobre la chimenea


Cuida tus rasgos pictoricos,
limpialos y retócalos
con la pintura original de tus pinceladas.

El desgaste del tiempo
agobia a la obra de arte;
al igual que el mismo abandono
fractura sus delicadas lineas.

No consumas, por favor,
todo aquel trabajo renacentista
cuna de esfuerzo de miles de años
para lograr acuñar en la tela,
el rostro amable de una musa

Y es que se te olvida,
que ya has sido dibujada antes
y ese cuadro no te pertenece.

Es obra de su autor,
la modelo sólo puede alegrarse
o llorar
ante el resultado.
Colgará por siempre
sobre la chimenea de mármol
que dispuse para que todos te vieran.

Recuerda, musa atormentada
de no hurtar mi preciosa creación.
No trates de robar la imagen que tengo de tí,
puesto que la construí tras largas noches en vela
y no te corresponde a ti;
andar modificando mis recuerdos